LA FLOR DE CEMPASÚCHIL ES LA GRAN
PROTAGONISTA DEL DÍA DE MUERTOS. LOS MERCADOS, PANTEONES Y OFRENDAS SE LLENAN
DE SU COLOR Y AROMA, PERO ¿CÓMO SE CONVIRTIÓ EN UN ÍCONO DEL 1 Y 2 DE
NOVIEMBRE?
Conoce 5 datos curiosos sobre su uso antes de la Conquista, el cultivo de cempasúchil en México y el sincretismo de festividades que dieron paso al Día de Muertos tal y como lo conocemos actualmente:
1. CEMPOALXÓCHITL: LA FLOR DE 20 HOJAS
El cempasúchil es una flor endémica de México y Centroamérica y debido a que su color que era comparado con las distintas tonalidades del Sol, diversas culturas mesoamericanas les dieron un uso ritual, medicinal y decorativo.
El vocablo náhuatl cempoalxóchitl significa “20 flores” o bien, “flor de 20 pétalos”; sin embargo, también era conocida como expujuj para los mayas y apátsicua para los purépechas.
2. LA FLOR DE LAS FESTIVIDADES PREHISPÁNICAS
En las culturas mesoamericanas, el cempasúchil no sólo se utilizaba durante las fiestas nahuas de muertos, el Miccaühuitontli (fiesta de los muertos pequeños) y el Huey Miccaühuitl (fiesta de los muertos grandes): esta flor también formaban parte de distintas celebraciones prehispánicas, como los festejos de Huey Tecuilhuitl (la gran fiesta de los señores), que tenían como protagonista a Cihuacóatl, diosa madre:
“Acabada esta ceremonia [que hacían en honor a Cihuacoatl, durante la fiesta Huey Tecuilhuitl] salían todas las mujeres y mancebas que tenían, con el cabello tendido y cercenado por encima de las cejas y sobre él unas guirnaldas de rosas amarillas grandes, que ellos llaman cempoalxóchitl”.
3. FLORES MACHO Y HEMBRA
La referencia más antigua que se conoce del cempasúchil aparece en el Códice Florentino, donde fray Bernardino de Sahagún describe a esta especie y la diferencia que hacían los mexicas entre las flores hembras y las macho, un dimorfismo sexual que científicamente no existe, pero que los antiguos nahuas explicaban a partir del género:
«Estas flores que se llaman cempoalxóchitl, son amarillas y de buen olor, y anchas y hermosas, que ellas se nacen, y otras que las siembran en los huertos; son de dos maneras, unas que llaman hembras cempoalxóchitl y son grandes y hermosas, y otras que hay las llaman machos cempoalxóchitl (y) no son tan hermosas ni tan grandes».
4. SU CULTIVO EN LA CIUDAD DE MÉXICO
En la Crónica Mexicana de Alvarado Tezozómoc, el historiador describe cómo florecía el cempasúchil en las chinampas y camellones de la Ciudad de México junto con otras especies como el maíz, frijol, chile y tomate:
«Y luego dio aviso el Tlilpotonqui Cihuacoatl a los chinanpanecas y dentro de la ciudad sembrasen los camellones mucha cantidad de maíz, frijol, calabazas, rosas de cempoalxóchitl, acaxuchitl, chile, tomate y muchos árboles, floreciese la gran ciudad de México desde lejos, y así fue hecho, que no parecía la ciudad desde tres cuatro leguas sino un laberinto huerto florido, deleitoso, alegre, contento al verle».4
5. EL CEMPASÚCHIL Y EL DÍA DE MUERTOS
La flor utilizada para distintas festividades prehispánicas trascendió hasta nuestros días como un ícono del Día de Muertos debido a distintas razones: en primer lugar, porque su siembra a finales de junio coincide con su floración a principios de noviembre.
En esta misma época del año se celebraba el Miccaühuitontli y el Huey Miccaühuitl, fiestas prehispánicas dedicadas a los muertos que coincidían con el final el ciclo agrícola y que tras la Conquista, se fusionaron con las celebraciones del calendario cristiano del Día de Todos los Santos y el Día de Fieles Difuntos.
Fuente: https://www.muyinteresante.com.mx/historia/datos-curiosos-del-cempasuchil/